Somos Planta 18, una agencia de Marketing de Experiencia, generamos el marketing del punto de contacto, de proximidad, el de tú a tú. El que tiene como objetivo convertir clientes en fans. Buscamos y creamos entornos para que las marcas puedan tener ese tipo de contacto emocional con consumidores y empleados.
Y, para nosotros, ver crecer algo que has plantado, alimentarlo y cuidarlo, es emocionante.
Estamos trabajando en un proyecto apasionante: crear huertos urbanos en las oficinas de las empresas. Esta iniciativa involucra a departamentos clave como marketing, comunicación, recursos humanos o responsabilidad social corporativa.
¿Por qué sembrar o cosechar alimentos puede ser bueno para tu compañía? Un huerto urbano es una formidable idea para una empresa. Promueve hábitos de vida saludables y una alimentación equilibrada entre sus empleados. Fomenta un continuo team buiding e impulsa, entre los trabajadores, orgullo por pertenecer a una empresa innovadora y con valores saludables tanto éticos como físicos.
Pero, además, se trata de una iniciativa interna que trasciende a otros ámbitos: la empresa adoptará una imagen exterior moderna, solidaria y sostenible. También es importante el componente de satisfacción: ¿Si lo tiene La Casa Blanca, por qué no nosotros? Para comenzar el proyecto, hemos definido 7 fases: 1º Prospección de emplazamientos: analizamos las instalaciones y determinaremos la mejor ubicación para el huerto. 2º Diseño y presupuesto. 3º Plan de comunicación para dar a conocer el proyecto a todos los empleados y públicos de la empresa. 4º Ejecución y planificación de cultivos. 5º Mantenimiento. 6º Continuidad. 7º Ampliación del huerto de empresa al huerto de casa.
Y una vez montado el huerto… ¿cómo lo mantenemos? Hay dos posibilidades: nosotros, Planta 18, asumimos la gestión del huerto en su totalidad con equipos de horticultores y un experto ingeniero agrónomo. La otra opción es la más recomendable y más valiosa para la empresa: desarrollar una gestión compartida entre Planta 18 y los empleados de las empresas hasta alcanzar el nivel máximo de autogestión por parte de la compañía.
¡Y ahora viene lo mejor! Una vez que el huerto está funcionando y la tierra nos dé los primeros frutos… ¿qué hacemos con la cosecha? Nosotros siempre aportamos algunos consejos: Dejemos claro un concepto: la finalidad de nuestros huertos no es la de suplir alimentos, sino más bien, la de promover una diversificación de los hábitos alimentarios, la calidad de los alimentos y la vida sana en general.
Pero las frutas, verduras y plantas aromáticas crecen, y la producción es continua, y bastante abundante! Aconsejamos utilizar parte de las cosechas como consumo propio en la cafetería o comedor de las oficinas para elaboración de los platos que allí se sirvan. Además, regalar a los propios empleados hortalizas de temporada para comerlas en casa con sus familias. De este modo, toda la plantilla se sentirá integrada en el proyecto y estará orgullosa de sus frutos… También se puede hacer donaciones a comedores sociales y ONG’s.
En resumen, los huertos urbanos no son una tendencia cool o una moda hippy. Estas cosechas son un éxito en todo el mundo, una realidad en Nueva York, Chicago, París, Bangkok, Melboune, Sidney, Montreal,… Los ”war gardens” creados durante la I y II Guerras Mundiales en EEUU y Reino Unido para el autoabastecimiento, se han convertido en una realidad promulgada y financiada por entidades gubernamentales y grandes compañías de todo el mundo.
¡¡Ponte en contacto con nosotros, y comprueba lo fácil que es empezar a plantar!!